El astronauta de la Administración Nacional de Aeronáutica y
el Espacio (NASA) Frank Rubio, y Serguéi Prokopiev y Dmitri Petelin,
cosmonautas de la agencia espacial rusa Roscosmos, aterrizaron en la Tierra
luego de la misión espacial más larga en la historia.
El viaje de los astronautas se extendió durante más de un
año en la Estación Espacial Internacional(ISS, por sus siglas en inglés), que
se ubica a 400 kilómetros del planeta Tierra. Finalmente -y luego de una misión
que aseguraron resultó "exitosa"- aterrizaron en el día de ayer en
Kazajistán. La agencia espacial rusa indicó que pasaron 370 días, 21 horas y 22
minutos en el espacio.
Sin embargo, la larga estancia de los astronautas no fue
algo programado. La tripulación debía regresar en marzo, pero quedó seis meses
varada por el mal funcionamiento del circuito de refrigeración de la cápsula
rusa Soyuz MS-22. De esta forma, lo que debería haber sido una misión de 180
días se convirtió en una estancia de 371 días, con lo que los tres pudieron
romper el récord de permanencia en el espacio para ambos países.
Los problemas comenzaron cuando un micrometeorito perforó el
sistema de refrigeración de la nave en la que habían llegado tres meses antes y
la que debería ser su transporte para regresar a Tierra.
Pese a que el ámbito espacial es uno de los pocos en el que
Estados Unidos y Rusia colaboran, la competencia en materia de alcance
interplanetario continua.
El último record ostentado por un estadounidense databa del
2022, con el astronauta Mark Vande Hei, con 355 días consecutivos en órbita.
Por otro lado, el record absoluto en la historia continúa siendo del cosmonauta
ruso Valeri Poliakov, con 437 días.