Múltiples son las acciones que suelen realizar las y los
conductores con la intención de no ser captados ante una eventual infracción:
Una cinta adhesiva que transforme una letra o un número; una cinta de tela
colgando que impida la legibilidad completa de la placa; o barro, simulando
suciedad, para tapar el dominio. ¿Saben los conductores si esta práctica está
permitida? ¿Creen que se realiza frecuentemente? ¿Qué opinan sobre las causas
que llevan a los conductores a realizarla?
El Observatorio de CECAITRA, la Cámara que nuclea a empresas
productoras de software vial, realizó un sondeo en hogares de CABA y del Gran
Buenos Aires, con el objetivo de conocer qué sabían y opinaban los conductores
sobre la temática.
Al preguntar: "¿Cree que tapar o adulterar las patentes está
permitido o prohibido por la ley?", la mayoría (73,2%) afirmó que no está
permitido, aunque el 11,9% dijo que sí está permitido y el 10,1%, sostuvo que
no está ni permitido ni prohibido. El resto dijo no saber.
En la respuesta, los adultos demostraron tener mayor
conocimiento sobre el tema. Mientras que 9 de cada 10 conductores de 50 a 64
años eligieron la opción "no está permitido"; el número bajó a 6 de 10 en los
menores de 29 años.
La ley de tránsito nacional, en su artículo 40 expresa los
requisitos para circular, y en su inciso d plantea como indispensable "que el
vehículo, incluyendo acoplados y semirremolques tenga colocadas las placas de
identificación de dominio, con las características y en los lugares que
establece la reglamentación. Las mismas deben ser legibles de tipos
normalizados y sin aditamentos".
"Tapar el dominio con intenciones claras de no poder ser
sancionado, es salir a la calle, con la idea previa de incumplir la ley. Nada
justifica que se circule con un dominio ilegible ya que evidencia que hay
deseos de cometer una infracción. Como podemos ver, el 25% de los consultados
no tienen en claro la falta que implica, y es un dato que debe alentarnos a
promover la educación vial", sostuvo el vocero del Observatorio Vial de
CECAITRA, Facundo Jaime.
En el sondeo también se quiso conocer qué es lo que veían en
la calle los encuestados. Así, se consultó: "¿En qué medida cree que en
Argentina es habitual ver patentes tapadas o modificadas a propósito?" y la
mitad (57,2%), dijo que es bastante habitual; el 28,8% sostuvo que es poco
habitual; y el 14% no tuvo opinión sobre la conducta.
En esta pregunta, también hubo diferencias notorias teniendo
en cuenta las edades. Para el 70% de los conductores de 30 a 49 años es
habitual ver patentes modificadas o tapadas; pero el número bajó al 39, 8% en
los más jóvenes, menores de 29 años.
Por último, se quiso conocer la opinión acerca de cuáles son
las causas que llevan a realizar esta práctica. Se preguntó: "¿Cuál cree es la
principal razón por la que se tapa o adultera la patente?". El 56,2% afirmó que
es para evitar el pago de fotomultas; el 27,6% que se vincula a otro tipo de
delitos; el 9% que es por descuido u olvido; y el 7,2% no tiene opinión al
respecto.
"Que más de la mitad de los consultados considere que la
adulteración de las patentes es una práctica habitual, nos da una foto de cómo
perciben el tránsito y nos pone en alerta. Desde CECAITRA, consideramos que la
educación y la concientización vial, deben ir de la mano del control y la
sanción. Por ello, además de estar atentos con estas prácticas, sostenemos que
debe educarse a los conductores ya que están cometiendo una infracción grave",
finalizó Jaime.